1 Reyes 18:13 RVC
13 ¿Acaso no te han dicho, mi señor, que
cuando Jezabel estaba matando a los profetas del Señor, yo escondí a cien de
ellos? A cincuenta los puse en una cueva, y a los otros cincuenta los puse en
otra, y los alimenté con pan y agua.
Qué espíritu se mueve con el tema del aborto
no es tan fácil de discernir. La realidad es que son varios, no es uno solo,
sin embargo, es claro que uno toma la delantera y lidera a los demás.
Se ha hablado hasta el cansancio de Moloc, no
voy a volver sobre el tema y sin dudas que es uno de los principales. Yo mismo
he comentado sobre él tiempo atrás. Pero luego entendí que no era el “líder”.
Sacrificios humanos y de niños requerían diversos ídolos en la historia
cananea, y por supuesto, en toda la historia de la humanidad caída.
Lo cierto es que Moloc, como tal, si bien ha estado
siempre presente en nuestro país, no está dentro de los espíritus más
significativos. Es claro que Jezabel es la principal dentro de los espíritus
territoriales argentinos, pero, ¿por qué está relacionada directamente con el
aborto?
Hay dos indicios muy claros. El primero lo
encontramos en la Biblia: Jezabel se encargó de eliminar a los profetas; hoy
sabemos que Dios está levantando a una generación profética y por lo tanto,
¿qué espíritu va a estar particularmente interesado en frenarla? Pues el mismo
de siempre.
El otro indicio, por demás de evidente, es
ver qué tipo de movimiento levanta la bandera del aborto y ahí se nos hace
claro que el espíritu, Jezabel, que inspira a ese movimiento es el que también
está por detrás del aborto.
Por lo tanto, sin abundar más en un tema
sobre el cual se han escrito libros, según entiendo, la clave espiritual para
orar contra el aborto es enfocar al espíritu de Jezabel en primer lugar. Por
supuesto, tampoco olvidar a los otros.
Pero junto con Jezabel / Acab (el “dominador”
y el que se deja “dominar”, no necesariamente femenino / masculino, está claro)
hay otro espíritu muy cercano dentro de las iglesias que es el responsable del
aborto espiritual y sobre el cual ya he hablado extensamente en otros artículos.
Si las iglesias no se despojan de él, no tendrán autoridad para luchar contra
el aborto natural. Si tan difícil ha sido la lucha hasta ahora es porque ese
espíritu que aviva el aborto espiritual está demasiado arraigado y “querido”
dentro de nuestras congregaciones. Debemos despojarnos de él para tener
autoridad con lo primero, pero sobre esto hablaremos un poco más en el próximo
artículo.
Danilo Sorti
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