Gálatas 6:1-2 RVC
1 Hermanos, si alguno es sorprendido en
alguna falta, ustedes, que son espirituales, restáurenlo con espíritu de
mansedumbre. Piensa en ti mismo, no sea que también tú seas tentado.
2 Sobrelleven los unos las cargas de los
otros, y cumplan así la ley de Cristo.
Uno de los aspectos que hoy se ha vuelto más
difícil en las iglesias (nunca fue fácil…) es corregirnos los unos a los otros,
tratar adecuadamente con el pecado de nuestros hermanos, y permitir que ellos
traten con el nuestro.
Dado que vivimos en un siglo de extrema
indulgencia, no sabemos cómo tratar adecuadamente con los pecados de nuestros
hermanos sin que eso implique una terrible ofensa. Por supuesto que no es fácil
para nadie aceptar sus errores, menos aún cuando termina siendo expuesto
públicamente, pero la Biblia es bien clara al respecto. No se trata de lo que
nos gustaría, se trata de lo que es mejor, y lo mejor es corregirnos entre
nosotros ANTES QUE tenga que hacerlo el Señor directamente.
Aceptemos que la gran mayoría no tenemos
experiencias, o buenas experiencias, en ese tema, y que por lo tanto
necesitamos aprender a dar y recibir corrección, y que eso no es una opción. Y
a partir de allí, empecemos a hacerlo.
El pasaje de Gálatas nos exhorta a la
mansedumbre y la humildad: no debemos ponernos en posición de superioridad ni
de enojo, ya que también nosotros podemos ser tentados igualmente y
encontrarnos más adelante en esa posición. Más bien, debemos asumir la
necesidad de ayudarnos unos a otros en las debilidades, primero, y corregir
después.
Mateo 18:15-17 RVC
15 »Por tanto, si tu hermano peca contra ti,
ve y repréndelo cuando él y tú estén solos. Si te hace caso, habrás ganado a tu
hermano.
16 Pero si no te hace caso, haz que te
acompañen uno o dos más, para que todo lo que se diga conste en labios de dos o
tres testigos.
17 Si tampoco a ellos les hace caso, hazlo saber
a la iglesia; y si tampoco a la iglesia le hace caso, ténganlo entonces por
gentil y cobrador de impuestos.
Este es el pasaje más conocido, en donde se
nos exhorta a cuidar la honra de nuestro hermano y no exponerlo
innecesariamente; exactamente lo contrario a lo que solemos hacer hoy con las
redes sociales. Tengamos en cuenta que estas palabras están dirigidas a una
“comunidad de hermanos”, en donde había una clara relación de igualdad. Se
supone que la iglesia debe ser eso, pero en la práctica no lo es.
1 Timoteo 5:19 RVC
19 No admitas ninguna acusación contra un
anciano, a menos que haya dos o tres testigos.
Por eso es que Pablo nos presenta aquí una
figura de un mediador, en este caso Timoteo, que, actuando con autoridad
apostólica, puede resolver conflictos entre un líder y los hermanos. Pero aquí
se evitan las acusaciones mentirosas, de las que este siglo está plagado en
todo ámbito: para empezar a considerar un asunto debe haber dos o tres
testigos, ya que es muy probable que un líder tenga enemigos que deseen
quitarlo de su puesto. La realidad es que los pastores suelen escuchar al
hermanito siempre quejoso hablando mal de algún consiervo, pero la exhortación
es a que ni siquiera hay que oírlo.
1 Timoteo 5:20 RVC
20 A los que persisten en pecar, repréndelos
delante de todos, para que los demás también teman.
Si la Biblia es muy cuidadosa en no exponer
de manera innecesaria a nadie, también es enfática en decir que los que
insisten en pecar SÍ deben serlo. Pero cuidado: no se trata del que se mandó
una macana una vez, sino del que insiste en el pecado.
2 Tesalonicenses 3:6,14,15 RVC
6 Hermanos, en el nombre de nuestro Señor
Jesucristo les ordenamos que se aparten de todo hermano que viva
desordenadamente y no siga las enseñanzas que ustedes recibieron de nosotros.
14 Si alguien no obedece a lo que en esta
carta decimos, señálenlo y no se junten con él, para que se avergüence.
15 Pero no lo traten como enemigo, sino
aconséjenlo como a un hermano.
Hay gente que no quiere cambiar, al menos por
ahora, aunque sin llegar a estar en pecados groseros. En ese caso Pablo nos
manda a apartarnos de los tales, a ver si recapacita. Pero siempre manteniendo
el amor en la relación.
Santiago 5:19-20 RVC
19 Hermanos, si alguno de ustedes se ha
apartado de la verdad, y otro lo hace volver a ella,
20 sepan que el que haga volver al pecador de
su mal camino, lo salvará de la muerte y cubrirá una gran cantidad de pecados.
Decididamente corregir a un hermano no es
agradable, y el resultado es incierto: nadie dice que el problema se solucione
realmente y que no suframos alguna represalia. Pero hay una promesa, hay una
recompensa en el cielo. No perdamos eso de vista.
Danilo Sorti
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