Isaías 40:15 RVC
15 Para él, las naciones son como una gota de
agua que cae del cubo; las considera como granos de polvo en las balanzas, y
hace que las islas desaparezcan como polvo.
El domingo 16/06/19 varias provincias
argentinas tuvieron elecciones para autoridades locales y provinciales, entre
ellas, Santa Fe. Como ya estamos acostumbrados, algo ocurre cada tanto en
nuestro país por lo cual somos noticia internacional, y ese día no fue menos.
Tuvimos el apagón eléctrico más grande de la historia; casi todo el país
(excepto Tierra del Fuego) y Uruguay se vieron afectados por una falla que, al
día de hoy, permanece sin explicación. No fue nada demasiado grave (más allá de
no haber electricidad para las personas y procesos que la requieren sí o sí,
vale aclarar…) y con el correr del día se restableció.
Pero no era un día común; coincidieron las
elecciones provinciales y el día del padre, además de un clima frío (los
primeros fríos fuertes de la temporada invernal) y lluvioso. Y la hora en que
ocurrió no fue cualquiera: 7:07.
Si consideramos las elecciones que ocurren
cada dos años a veces desdobladas, sin considerar las primarias, la
probabilidad de que ocurra un día de elecciones es del 0,41 %, y de que se dé a
las 7:07 es del 0,07 %; por lo que un apagón generalizado, que no había
ocurrido nunca hasta ese momento, tenía una probabilidad del 0,029 de ocurrir
con esa coincidencia, sin tener en cuenta que además coincidió el día del padre.
Bueno, demasiadas casualidades, ¿no?
Realmente no importa mucho la causa, ni
siquiera si fue un supuesto sabotaje o ciberataque, o una simple falla o error
de cálculo, nada escapa al control del Dios para quien las naciones son apenas
granos de polvo. ¿Qué nos quiso decir?
Se pueden hacer muchas especulaciones pero no
creo que sea prudente, los simbolismos generalmente son bastante “abiertos”,
por lo que una interpretación correcta requiere la guía específica el Espíritu
Santo. Sin embargo, algunos sentidos son muy evidentes.
La primera impresión que tuve en el Espíritu,
y que luego me corroborada una profeta amiga, fue que Yahvéh mismo estaba
diciendo: “Yo estoy al control, no se enorgullezcan los hombres ni piensen que
van a hacer lo que Yo no les permita”. Ese era el mensaje más evidente en medio
de un acto eleccionario, cuando las personalidades y los egos salen a relucir
en “todo su esplendor”: Dios sigue al control y puede “cortarle la luz” a quien
Él quiera.
En Santa Fe estábamos, como el resto de las
provincias, con el duro conflicto entre celestes y verdes, pero fue aquí donde
había una lista a diputados provinciales claramente provida, con cero pesos
para la campaña y duramente castigada por los sectores verdes.
Con todo en contra, una lista “imposible” en
la que confluyeron una conductora mediática, un pastor evangélico, un abogado
católico y otros, logró posicionarse bien en la cámara de diputados, y dada la
conformación política de la provincia, jugará sin duda un rol importante en
alianzas con el gobierno provincial, por lo que su voz deberá ser escuchada.
Impensable hace un año atrás.
¿Pero qué quiere decir el siete? Veamos una
interpretación (gods-kingdom-ministries.net):
“Siete (zayin), Finalización, Perfección
Espiritual.
“Zayin es un arma en hebreo. El arma perfecta
es la Espada del Espíritu, mediante la cual se realiza la guerra espiritual,
porque " las armas de nuestra guerra no son carnales " (2 Cor. 10: 4).
“Siete es el número bíblico de terminación y
perfección espiritual. Como tal, el Salmo 7 habla de las dos inundaciones por
las cuales la tierra se limpia y se lleva al perfecto orden del Reino.
“Siete días completa un ciclo sabático. En
Ap. 10: 7, el misterio de Dios se termina cuando el séptimo ángel toca la
trompeta. En Ap. 16:17, “se hace” cuando el séptimo ángel vierte el séptimo
frasco en el aire. Tomó siete días consagrar a Aarón y sus hijos al sacerdocio
(Lev. 8: 31-35) antes de salir del tabernáculo en el octavo día. Josué y el
ejército israelita tuvieron que marchar alrededor de Jericó siete días (Josué
6:15) antes de que cayera la ciudad.”
Lucha espiritual, fin de un ciclo,
intervención divina para completar algo… me parece que el significado es por
demás de claro
En las elecciones provinciales el socialismo
fue derrotado en la provincia luego de 12 años de gobierno, que empezó bien, no
cumplió todas sus promesas, realizó alianzas inconvenientes en el camino y
degeneró en los últimos años en una primero sutil y luego descarada imposición
de la ideología de género en las escuelas, virtual legalización del aborto en
sus efectores de salud (cuando sigue prohibido a nivel nacional), persecución
de profesionales y docentes disidentes, y alejamiento progresivo de las
necesidades del pueblo que lo votó. Anteriormente gobernó el peronismo durante
24 años, lo cual confirma una verdad
histórica en Argentina: ningún sistema dura para siempre…
No voy a profundizar análisis políticos
extensos y aburridos para los que no viven en la provincia, pero la conmoción
política y la “lucha” entre partidos que esto generará será muy importante y
parte del juicio de Dios contra un sistema, a la vez que oportunidad para
extender el reino hacia las estructuras sociales y políticas.
Y hay algo más: por las características de la
provincia y la elección, el “conflicto” aquí era nacional, por lo que la
victoria del partido provida adquirió dimensiones nacionales. Había mucho más
en juego que una elección provincial.
El presidente actual subió al poder gracias a
la intervención decidida del Señor; recibió promesas de bendición e incluso de
un segundo mandato, pero muy pronto decidió desobedecer los mandatos divinos y
venderse al sistema del mundo. Sencillamente Dios cortó con su proyecto. Si en
la historia argentina ningún sistema político duró “para siempre”, ahora los
tiempos son más breves.
Los que vivimos aquí y hemos soportado la
presión espiritual desde marzo de 2018 cuando se habilitó el debate del aborto
podemos decir que hemos sentido una liberación, algo cambió en los aires, una
puerta nueva se abrió, algo se quebró, después de 15 (número de gracia) meses
de esa fecha.
Para el que quiera escuchar, Dios ha hablado.
Claro, no todos se enteraron de lo que pasó el domingo a la mañana, los que
estaban durmiendo y se despertaron al mediodía no. Y eso también es profético:
los que duermen espiritualmente, los que tienen sus ojos espirituales cerrados,
no podrán ver las señales de los tiempos ni lo que Dios está haciendo en medio
de las naciones. Pero los otros han recibido un fuerte consuelo: Él sigue al
control y no permitirá que los planes de Satanás se establezcan en esta nación
que Él ha elegido para mostrar Su misericordia inmerecida. De ahora en más, la
lucha sigue, y más fuerte, pero los cielos están abiertos, como también en lo
natural el día de hoy (18 de junio, dos días después) lo demuestra con un cielo
despejado y un sol brillante.
Danilo Sorti
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