sábado, 30 de septiembre de 2017

258. El ministerio profético hoy: ¿no hay nadie capaz de juzgar correctamente?

Deuteronomio 18:18-22 RVC
18 Voy a hacer que de entre sus hermanos surja un profeta como tú. Pondré mis palabras en sus labios, y él les comunicará todo lo que yo le ordene decir.
19 Pero yo le pediré cuentas a todo el que no atienda las palabras que ese profeta proclame en mi nombre.
20 Y el profeta a quien yo no le haya ordenado hablar, o que hable en nombre de otros dioses pero pretenda hablar en mi nombre, será condenado a muerte.
21 Tal vez digas en tu corazón: ‘¿Y cómo vamos a saber si esa palabra no proviene del Señor?’
22 Tú no tengas miedo de ese profeta, que si llega a hablar en mi nombre y sus palabras no se cumplen ni se hacen realidad, eso hará ver que yo, el Señor, no he hablado, y que tal profeta habló con arrogancia.”

Deuteronomio 13:1-5 RVC
1 »Cuando en medio de ti surja algún profeta, o soñador visionario, y te anuncie señales o prodigios,
2 si acaso se cumple la señal o el prodigio anunciado y él te dice: “Vayamos en pos de dioses ajenos, que tú no conoces, y sirvámosles”,
3 no prestes oído a las palabras de tal profeta o soñador visionario. Seguramente el Señor su Dios los está poniendo a prueba, para ver si ustedes aman al Señor su Dios con todo su corazón y con toda su alma.
4 Ustedes deben ir en pos del Señor su Dios, y temerlo sólo a él. Deben cumplir sus mandamientos y atender su voz. Sólo a él deben servir; sólo a él deben seguir.
5 En cuanto a ese profeta o soñador visionario, será condenado a muerte por haberlos aconsejado a rebelarse contra el Señor su Dios. Porque el Señor te sacó de Egipto, te rescató del país donde eras esclavo; en cambio, aquél habrá intentado apartarte del camino que el Señor tu Dios te mandó seguir. Así acabarás con el mal que haya en medio de ti.

Desde Deuteronomio el Señor nos dejó muy en claro cómo distinguir un profeta verdadero de uno falso. Por un lado tenemos el caso de las señales que no se cumplen, pero sobre eso vamos a profundizar un poco después; ahora vamos a concentrarnos en el texto del capítulo 13, es decir, qué pasa cuando las señales SÍ SE CUMPLEN, pero el contenido doctrinal del tal profeta es erróneo. Bueno, simplemente, ¡es falso!

Es interesante analizar este criterio que nos está presentando el Señor; un profeta (entre otras cosas) anuncia el futuro y presenta señales, no se trata exactamente de lo mismo. Las señales son precisamente eso, “señales” que están llamando la atención e indicando (fundamentalmente a los incrédulos) que “aquí está pasando algo a lo que vale la pena prestar atención”. Pero lo extraordinario, lo “fuera de lo común”, lo extraño, no necesariamente es señal de veracidad. El Señor hizo milagros y señales, Sus discípulos inmediatos también, el ministerio de señales y sanidades fue claramente restaurado en el siglo XX, y aunque luego hayan surgido muchos engañadores, no podemos negarlo. Pero las señales cumplidas no constituyen indicación indubitable de veracidad, porque,

Mateo 24:24 RV1995
24 porque se levantarán falsos cristos y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si es posible, aun a los escogidos.

2 Tesalonicenses 2:9-10 RVC
9 La llegada de este malvado, que es obra de Satanás, vendrá acompañada de gran poder y de señales y prodigios engañosos,
10 y con toda falsedad e iniquidad para los que se pierden, por no haber querido recibir el amor de la verdad para ser salvados.

Esto es claro. Ahora bien, ¿qué pasa si lo que anuncia el profeta no se cumple? Bueno, aquí debemos ser más cuidadosos y hurgar un poco más en las Escrituras. Por un lado tenemos el texto de Deuteronomio 18 que nos da una advertencia, pero eso no es todo.

Jeremías 26:16-19 RVC
16 Los príncipes y todo el pueblo respondieron a los sacerdotes y profetas: «Este hombre no ha hecho nada que merezca la pena de muerte, porque nos ha hablado en el nombre del Señor, nuestro Dios.»
17 Algunos de los ancianos del país se levantaron y hablaron a todo el pueblo allí reunido, y dijeron:
18 «Durante el reinado de Ezequías sobre Judá, el profeta Miqueas de Moreset habló con todo el pueblo de Judá, y le dijo de parte del Señor de los ejércitos: “Sión quedará como un campo barbechado, y Jerusalén se convertirá en un montón de ruinas. ¡En lo alto de la colina, el templo quedará convertido en un bosque!”
19 Con todo, ni el rey Ezequías ni el pueblo de Judá lo mataron. Al contrario, Ezequías mostró su temor por el Señor y oró en su presencia, y el Señor ya no le hizo el mal que les había anunciado. ¿Habremos de cometer nosotros un mal tan grande contra nosotros mismos?

Hermanos, si entendemos bien, ¡la profecía de Miqueas no se cumplió!, no por lo menos en el tiempo anunciado. ¿Eso convierte a Miqueas en un falso profeta? No, de ninguna manera; eso ilustra EL VERDADERO PROPÓSITO DE LA PROFECÍA: lograr el arrepentimiento y conversión de los oyentes. Finalmente Jerusalén fue destruida, aunque no en el tiempo originalmente anunciado por Miqueas, quien profetizó después de Isaías hacia finales del Siglo VIII a. C., sino unos dos siglos después, en el 587 a. C.

1 Reyes 21:20-29 RVC
20 Pero Ajab le replicó a Elías: «¡Al fin me has encontrado, enemigo mío!» Y Elías respondió: «Te he encontrado porque te has hecho esclavo de la maldad, en la presencia misma del Señor.
21 Pero el Señor te dice: “Voy a castigarte. Voy a barrer hasta el último varón de tu palacio, sea libre o esclavo, como si fueran polvo.
22 Lo mismo que hice con la familia de Jeroboán hijo de Nabat, y con Basá hijo de Ajías, lo voy a hacer con tus descendientes, porque te has rebelado contra mí y has hecho pecar a mi pueblo, para provocar mi enojo.
23 En cuanto a Jezabel, tu mujer, yo, el Señor, declaro que los perros se la comerán en la muralla de Jezrel.
24 A cualquier descendiente tuyo que muera en la ciudad, se lo comerán los perros; y al que muera en el campo, se lo comerán las aves de rapiña.”»
25 (En realidad, ningún otro rey fue como Ajab. Incitado por Jezabel, su mujer, se entregó a hacer lo malo a los ojos del Señor.
26 Fue un rey despreciable, pues se fue en pos de los ídolos, a la manera de los amorreos, pueblo al que el Señor desterró de entre los israelitas.)
27 Después de que Ajab escuchó a Elías, se rasgó sus vestiduras reales, se vistió de cilicio, y ayunó; luego se acostó sobre cenizas, y allí durmió y anduvo humillado ante el Señor.
28 Entonces la palabra del Señor vino a Elías el tisbita, y le dijo:
29 «¿Ya viste cómo Ajab se ha humillado ante mí? Sólo por eso, y mientras viva, no le enviaré la desgracia que le había anunciado. Pero su hijo y sus descendientes sí la padecerán.»

Nadie dudaría del ministerio profético de Elías, sin embargo esta palabra no se cumplió, no en el tiempo anunciado, ¿por qué? De nuevo, por el arrepentimiento de Acab, ¡Nada menos que Acab, el “modelo” por excelencia de rey impío! Bueno, pero aún de ese pecador despreciable, del cual la Biblia pudo decir que “ningún otro rey fue como Ajab”, ¡Dios tuvo misericordia y pospuso Su juicio!

Hermanos, no siempre que una advertencia de juicio no se cumpla en el tiempo señalado es señal de falsedad, lo que inequívocamente es señal de falsedad es que una promesa de bendición no se cumpla:

1 Reyes 22:10-12 RVC
10 Mientras tanto, los dos reyes se quedaron en la plaza que está junto a la puerta de Samaria, sentados en sus tronos y ataviados con sus mantos reales. Delante de ellos, los profetas les prodigaban buenos augurios.
11 Uno de ellos, Sedequías hijo de Quenaná, se acercó y les mostró unos cuernos de hierro que había hecho, y dijo: «Así ha dicho el Señor: “Con estos cuernos cornearás a los sirios hasta acabar con ellos.”»
12 Los demás profetas también animaban al rey, y le decían: «Vaya Su Majestad a Ramot de Galaad, y atáquela. El Señor le dará la victoria y entregará la ciudad a Su Majestad.»

Jeremías 28:9 RVC
9 Si el profeta anuncia paz, y sus palabras se cumplen, entonces se le reconoce como un profeta verdadero, enviado por el Señor.»

Sobre este tema hablé en otro artículo (219. ¿Quiénes son los falsos profetas? ¿Qué predican?; https://plus.google.com/communities/110726217481567373447).

El Señor Jesús nos alerta contra los falsos profetas, especialmente en el pasaje de Mateo 24, y además nos da otro elemento de análisis:

Mateo 7:16-23 RVC
16 Ustedes los conocerán por sus frutos, pues no se recogen uvas de los espinos, ni higos de los abrojos.
17 Del mismo modo, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.
18 El buen árbol no puede dar frutos malos, ni el árbol malo dar frutos buenos.
19 Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego.
20 Así que ustedes los conocerán por sus frutos.
21 »No todo el que me dice: “Señor, Señor”, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
22 En aquel día, muchos me dirán: “Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?”
23 Pero yo les diré claramente: “Nunca los conocí. ¡Apártense de mí, obreros de la maldad!”

Con todo, debemos diferenciar que aun cuando el profeta es falso porque sus frutos no lo acompañan, no necesariamente la profecía que diga será siempre falsa:

1 Reyes 13:20-23 RVC
20 Pero cuando estaban comiendo, el Señor le dio un mensaje al profeta que lo había hecho regresar,
21 y al varón de Dios que había venido de Judá le dijo con fuerte voz: «Así dice el Señor: “Por haberte rebelado contra el mandato del Señor, por no haber obedecido el mandamiento del Señor tu Dios,
22 y por haber regresado para comer pan y beber agua en donde el Señor te ordenó que no lo hicieras, tu cuerpo no será sepultado junto con tus padres.”»
23 En cuanto el varón de Dios terminó de comer y beber, el viejo profeta que lo había engañado le aparejó el asno.

Este viejo profeta era, como decimos por acá, “un trucho”, pero aún así esta profecía fue verdadera,  la anterior, con la que engañó al joven profeta, no. Cuidado, yo no estoy diciendo que debamos escuchar a esos mentirosos ni hacerles caso, pero aún a través de ellos eventualmente Dios puede hablar.

1 Corintios 12:3 RVC
3 Por tanto, quiero que sepan que nadie que hable por el Espíritu de Dios puede maldecir a Jesús; y que nadie puede llamar «Señor» a Jesús, si no es por el Espíritu Santo.

Además de los frutos, que llevan un tiempo, debemos discernir claramente las palabras de estos profetas. Y aquí vamos a detenernos un momento: cuando hay un anuncio de un juicio por venir no resulta prudente esperar hasta que ocurra para decir “¡Era cierto, el profeta era verdadero!”, debemos tener otros parámetros que nos permitan identificarlo antes. Uno de ellos está en el análisis del mensaje, pero no todos los cristianos pueden hacerlo adecuadamente, especialmente los más nuevos o los que no recibieron una adecuada formación bíblica, y esto lamentablemente incluye a muchísimos que tienen un corazón sincero para con Dios y que lo están buscando pero que se han criado en iglesias engañadoras. Es urgente que conozcamos más al Señor y Su Palabra, para poder tener discernimiento. Pero también es urgente que nos acerquemos a los hermanos con discernimiento y frutos probados, para que nos ayuden. Eso es lo que está diciendo Pablo al establecer un orden en el culto de la iglesia:

1 Corintios 14:26-33 RVC
26 Por lo tanto, hermanos, cuando ustedes se reúnan, tal vez cada uno tenga un salmo, una enseñanza, una revelación, un mensaje en lengua extraña, o una interpretación; pero todo deben hacerlo para la edificación.
27 Si se habla en una lengua extraña, que hablen dos, y hasta tres, pero que lo hagan por turnos, y que uno de ellos interprete lo que se diga.
28 Pero si no hay quien interprete, esa persona debe guardar silencio en la iglesia, y hablar para sí mismo y para Dios.
29 De la misma manera, que hablen dos y hasta tres profetas, y que los demás juzguen lo dicho.
30 Si alguien estando sentado recibe una revelación, el primero debe dejar de hablar;
31 así todos podrán profetizar por turno, a fin de que todos aprendan y sean exhortados.
32 El don de profecía debe estar bajo el control de los profetas,
33 pues Dios no es Dios de confusión, sino de paz. Como en todas las iglesias de los santos,

Notemos que la profecía no estaba reservada a un pequeño grupo selecto, como a muchísimos líderes les encanta enseñar hoy día, pero necesariamente tenía que ser juzgada, y todo en un contexto de orden y paz.

1 Juan 4:1 RVC
1 Amados, no crean a todo espíritu, sino pongan a prueba los espíritus, para ver si son de Dios. Porque muchos falsos profetas han salido por el mundo.

Finalmente, somos llamados a probar los espíritus de los profetas y las profecías. “Probar” no significa “sospecha sistemática”, significa simplemente mantenerse abierto a la palabra y pedir al Señor alguna otra confirmación: un sueño, una visión, una luz nueva de entendimiento sobre la Biblia, lo que sea. Puede ser difícil mantener una actitud abierta cuando hemos sido heridos, pero no olvidemos nunca que una cosa son los falsos que dicen hablar en nombre de Dios y otra muy distinta es el mensaje que Dios trae a través de vasos imperfectos. No sea cosa que, por procurar desechar a los falsos, desechemos las palabras de Dios.


Danilo Sorti





Ayúdanos a llevar el mensaje.
Oprime aquí para enviarnos tu ofrenda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario